Si todo el mundo supiera programar...

Matt Pearson, el autor de Novelty Waves, libro que hemos ya reseñado varias veces en este blog, dedica un capítulo de su libro a preguntarse qué pasaría si todo el mundo «hablara» (traducción literal) código. Comenta que no es un disparate pensar en una sociedad ideal en la que todo el mundo entendiera de código de programación. Desde Ubicuo Studio hemos comentado esto más de una vez, imaginando hasta una academia para niños para que aprendan código (como cuando aprenden inglés fuera de clase). El objetivo es que los adultos del futuro entiendan las bases del lenguaje que configura, en cierto modo, sus vidas. En una de las primeras entradas del blog de Ubicuo Studio en noviembre del 2011 comentábamos las palabras de Lev Manovich al respecto en el libro Software takes command:
Paradójicamente, mientras los científicos de ciencias sociales, los filósofos, los críticos culturales, los teóricos de los nuevos medios y de los tradicionales han cubierto todos los aspectos de la revolución de la informática, creando un gran número de nuevas disciplinas como los estudios de la ciber cultura, los estudios de internet, teoría de los nuevos medios, cultura digital; el motor que respira bajo la mayoría de todos estos temas, el software (programario), ha recibido muy poca o ninguna atención. El programario es aún invisible para la mayoría de académicos, artistas y profesionales de la cultura interesados en la informática y sus efectos sociales y culturales. […]
Si no nos dirigimos al programario en él mismo, corremos el peligro de investigar sólo los efectos en vez de las causas: el resultado que aparece en la pantalla del ordenador en vez de los programas y las culturas sociales que producen estos resultados. […]
Significa que todas las disciplinas que tratan sobre la sociedad contemporánea actual -arquitectura, diseño, crítica de arte, sociología, ciencias políticas, humanidades, estudios tecnológicos y científicos, etc. – deben tener en cuenta el rol del programario y sus efectos en los temas que investiguen.
Si todo el mundo supiera código
Pero, ¿Cómo van a tener en cuenta el rol del programario si no saben leer un programa? La única manera de leer código de programación es aprendiendo lenguaje de programación. No hace falta que seamos expertos, pero deberíamos saber las bases de programación para entender nuestra vida actual. Nos pasamos el día interactuando con programario, conocemos a nuestras parejas a través de la red o intimamos a través de dispositivos móviles y sus programas,… vivimos en el programario la mayor parte del día. ¿Cómo podemos ignorar una cosa que afecta tanto a nuestras vidas? Comemos plátanos, pero al menos sabemos cómo hay que hacer crecer un árbol.
¿Una idea loca?
Matt Pearson cita un texto de Evgeny Morozov en respuesta a una pregunta que le hicieron en una entrevista en The Guardian, le preguntan si sabe programar y si cree que todos deberíamos saber programar y él responde:
Creo que la idea más loca que he escuchado los últimos años es que todo el mundo debería aprender a programar. Es la idea más extraña y regresiva que he oído. Hay muy buenas razones por las cuales no queremos que todo el mundo aprenda física nuclear, medicina o cómo funcionan los mercados financieros. Nuestro proyecto de modernidad se ha basado en delegar el poder a gente especializada que quieren hacer el trabajo y ser recompensada a cambio. Estoy de acuerdo en que todos seamos conscientes de cómo funcionan las estructuras tecnológicas. Pero la idea de que todo el mundo debería aprender a programar es igual de plausible como decir que todo el mundo debería aprender a ser fontanero. Para mí no tiene ningún sentido.
Matt Pearson argumenta que programar es la habilidad del siglo XXI (definimos el siglo XXI, entonces, por el programario que se está desarrollando, entendiendo que es un hecho característico de este siglo). Dice que no necesitamos que la gente aprenda física nuclear, medicina, finanzas o cómo hacer jardines, pero que los niños deben saber un poco de estas disciplinas. Tomemos la medicina como ejemplo. ¿Podría una sociedad funcionar si sus ciudadanos no supieran nada de cómo funcionan sus propios cuerpos? Imaginemos que una sociedad totalmente analfabeta en este sentido pensaría que cuando le sangra la nariz se está muriendo. No sabría automedicarse cuando le duele la cabeza. Un mundo de iliteratos del código produce pánicos como el del efecto 2000 en el que muchísima gente creía sinceramente que los ordenadores explotarían cuando llegaran al año 2000. En el colegio nos enseñan biología rudimentaria, geología, geografía… no nos especializamos, pero gracias a estos conocimientos generales podemos no ser ignorantes del todo en nuestro día a día.
Logo: 1967. Lenguaje de programación para niños
Los intentos no han sido pocos. En 1967 se creó el lenguaje de programación LOGO pensado para que los niños aprendan a programar y, además, matemáticas. Este lenguaje de programación admitía comandos bastante sencillos que, una vez ejecutados, dibujaban en la pantalla una forma geométrica. Cuando yo era pequeña debí asistir al colegio más pionero en este sentido. Recuerdo que nos ponían delante de un ordenador (de los de pantalla verde) y nos hacían escribir comandos para dibujar formas en la pantalla. Utilizábamos el programa LOGO. Lo divertido era que después de aprender las bases, el niño podía experimentar introduciendo comandos y modificando los números, etc. produciendo infinidad de resultados. Lo que no teníamos en el colegio era este simpático robot en forma de tortuga que el niño podía controlar desde el ordenador en lenguaje LOGO, seguramente porque en esa época ya se podían dibujar gráficos en la pantalla de una manera virtual y no hacía falta representarlos de una manera física en un papel.